La logística sanitaria tiene verdaderos desafíos, en países en vías de desarrollo como Sierra Leona, con importantes problemas para distribuir medicamentos, al contar con escaso personal sanitario capacitado y con unas incesantes lluvias en la época húmeda, que dejan intransitadas las carreteras y vías de acceso. Ante esas carreteras adnegadas de lluvia, la gente opta por transportar a mano las mercancías, desde los almacenes a las unidades periféricas de consulta o dispensarios médicos.
Esta es la estampa gráfica del país con la tasa de mortalidad materna más alta del mundo y una esperanza de vida que apenas supera los 36 años de vida. Phyllis B. Ocran, responsable de Aprovisionamiento y cadena de suministro para UNICEF en Sierra Leona, asegura que con si se mejora la logística sanitaria, se salvarán millones de vidas humanas, que no tienen acceso a medicamentos.
Esta responsable trabaja con el Ministerio de Salud de Sierra Leona y colabora en uno de los proyectos puestos en marcha por el Zaragoza Logistics Center, centro investigación perteneciente al Gobierno de Aragón. El fin de este Este panorama urge de un nuevo sistema de logística, “que hay que instaurar de nuevo”, según esta experta, y que es consecuencia de la inestabilidad política y de una prolongada guerra civil que azotó el país desde 1991 hasta finales del 2002, cuando gracias a la intervención de las tropas de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y el apoyo de la comunidad internacional, se puso fin a esta masacre. Durante todos estos años se destruyeron los sistemas de logística sanitarios. En la tarea de reconstruirlos se haya Ocran, que está ayudando al ministerio configurar un “nuevo sistema para reestructurar toda la logística, que permita capturar nuevos datos, hacer un seguimiento de los medicamentos y ver qué medios básicos se van a necesitar para poner en marcha todo este aprovisionamiento de atención sanitaria gratuita.
He escrito este reportaje y puedes leerlo completo en PERIDISMO HUMANO