Cuanto más compartes, más sensación de vivir tienes

Esta foto la hice hace ya unos diez años. Es bonito encontrarla en mis archivos.

Recuerdo todavía esa mañana, en el micro, en Bolivia, en un barrio a la perifera de Santa Cruz de la Sierra, donde no había pavimento en las calles. Era la hora punta, por la mañana, cuando los mayores van al trabajo y los niños al colegio.

En ese tiempo recién estaba afincada en Bolivia. Por eso iba con mi cámara de fotos siempre conmigo. Tenía la mirada atenta para encontrar imágenes o momentos que inmortalizar.

En ese tiempo iba diariamente en micro, recorriendo distancias largas. Esa mañana recuerdo que era templada y realmente no cabía un alfiler en ese micro.

El trozo de pantalón vaquero, cinturón beige y camisa fucsia son míos. Ni sé como encontré el espacio para retratar a esa dulce niña, que me llegaba por debajo de mi cintura, por mi muslo, y estaba apretujada entre tanto adulto.

Hoy, esa pequeña de la foto ya será una adolescente. Y,en este instante, contemplándola sigo viendo esa ternura que ví esa mañana y me hizo sacar la cámara para hacer la foto.

Estar en Bolivia, especialmente en esos primeros años (ya llevo 10 años viviendo en este país) me ha hecho realmente darme cuenta de muchas cosas. Especialmente cuando tienes contacto con personas humildes, como en esa primera etapa, que convivía en una casa con misioneras brasileñas.

Puedo recordar las principales enseñanzas, vividas en carne y hueso.

⭐ Cuanto más compartes, más sensación de vivir tienes.

⭐ Sentir la libertad y confiar en las sorpresas de la vida, te mantiene con gran ilusión y alegría. ☀

⭐ Dedicar un tiempo de tu vida (días, meses o años) a estar en un proyecto solidario te abre los ojos a lo realmente importante.

⭐ Agradecer por lo que tienes es un sentimiento que se convierte en imán para atraer más y más momentos de calidad y felicidad.

⭐ Es bueno sentir y creer que la vida son etapas que nos depararán sorpresas buenas si estamos dispuestos a ello.

⭐ Todos podemos reinventarnos a cualquier edad, solo es cuestión de FE, ACTITUD y ACCIÓN.

Puedo decir que esa experiencia de convivencia con misioneras durante unos meses fue algo extraordinario.

Esta entrada ha sido publicada en Bolivia, Desarrollo humano, desarrollo personal, Personal, Reflexiones, Solidaridad y etiquetada como , , . Guarda el enlace permanente.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *